Te has preguntado, ¿de dónde rayos sacaron las ideas tus arquitectos favoritos? Algunos le llaman talento, otros lo llaman don pero la realidad es que todo es parte de un conjunto de reglas que a lo mejor empíricamente las sigues sin darte cuenta: el proceso creativo.
Existen varios autores del proceso creativo pero hoy te hablaré del propuesto por Graham Wallas, socialista inglés, profesor y teórico en ciencias políticas y en relaciones internacionales, así como uno de los líderes de la Sociedad Fabiana, y uno de los fundadores de la London School of Economics de Londres.
Según Wallas, existen 4 etapas del proceso creativo (preparación, incubación, iluminación y verificación) pero, ¿realmente un arquitecto utiliza este proceso para sacar sus ideas?
Proceso creativo de un arquitecto
Preparación
Lo primero que debe hacer un arquitecto es detectar las necesidades del usuario, al final una construcción puede verse lo más hermoso pero si no sirve para su principal objetivo, solo será un adorno más.
Incubación
Pregúntate a ti mismo, ¿qué pasaría si…?
Una teoría sobre la creatividad es el poder conectar cosas que no tienen sentido con el problema que queremos resolver, en esta parte es necesario que te alejes del trabajo por un momento, relaja tu cuerpo y deja que tu cerebro asocie mil cosas con el problema sin presionarlo. Un claro ejemplo de esta fase puede ser cuando Newton conectó la fuerza de gravedad con una manzana. Así de simple, así de rápido.
Iluminación
La idea, un flashazo llega cuando menos lo esperas aunque aquí es donde tienes que tener mucho cuidado para determinar si esta idea es viable o no. Otros autores llaman este momento como la experiencia Eureka.
Verificación
Aquí es cuando le muestras al cliente tu idea y él te da su aprobación o no. Algunas veces puede ser que sea lo que el cliente estaba buscando y otras veces puede ser que te proyectaste de más y sacaste el objetivo principal del proyecto para crear otra cosa totalmente distinta. Pero ojo, no estamos diciendo que está mal, solo que a veces tu proyecto pudiera impresiona al cliente y este se arriesgue contigo para sacar esa idea adelante.
Cada arquitecto tiene una forma diferente de ver las cosas y que, a lo mejor tu inspiración llega de diferente forma pero si sientes en algún momento que tu cerebro colapsó y que no puedes sacar una idea a flote, te damos algunos tips que te pueden ayudar en esta etapa.
Cómo desbloquear la creatividad de un arquitecto
1.- Siempre lleva una libreta
Uno nunca sabe cuándo llegará ese momento eureka, puede ser en el transporte público, caminando, en la ducha o incluso en el baño. Lo cierto es que cuando llega debes estar preparado para anotar esa idea y darle vueltas para saber si por ahí va lo que deseas.
2.- No hay ideas malas
Este es un clásico error que muchos arquitectos cometen: no existen ideas tontas, solo tontos que no idean. Qué tal y esa idea hace que pienses en otra y esa otra llega con la solución deseada. Nunca permitas que una “mala idea”, salga de tu cerebro sin haberla procesado al 100%.
3.- Comete errores
Parece frase cliché pero por cada 100 errores habrá 1 éxito. La idea de grandes arquitectos para hacer sus construcciones no salió de la noche a la mañana, solo se necesita de mucha paciencia y de cometer errores en el proceso, no en la construcción xD.
4.- Pide opiniones
No te quedes con los “me gusta” de tus amigos y conocidos, atrévete a pedirle la opinión al mundo, que destrocen tu trabajo, ¿te acuerdas de tu profesor que siempre reprobaba a todos? Eso necesitas en tu vida profesional, alguien que haga añicos tu trabajo y no lo digo por mala onda, sino porque solo así sacarás lo mejor de ti mismo.
Espero este artículo te sirva para desbloquear tu creatividad al máximo, que sea la gasolina para echar a andar esa máquina de ideas que tienes en tu cabeza, ya que este mundo necesita más constructores, más artistas, más personas como tú.